Tiempo en Málaga
El clima de Málaga es una de las principales razones que convierten a la capital de la Costa del Sol en un destino turístico imparable. Temperaturas suaves todo el año, escasas precipitaciones y 300 días de sol anuales, ¿qué más se puede pedir?
Málaga tiene un clima mediterráneo caracterizado por temperaturas suaves en invierno y cálidas en verano. La capital de la Costa del Sol está considerada como una de las mejores ciudades españolas para vivir, gracias al agradable tiempo de Málaga prácticamente doce meses al año.
Aunque existen variaciones térmicas en función de cada estación, el clima de Málaga no presenta fuertes contrastes, por lo que cualquier época es buena para visitar la ciudad. La temperatura media anual de Málaga es de 18°C.
Málaga en verano
Los veranos en Málaga duran prácticamente siete meses, ya que el clima cálido, el sol y la buena temperatura se extienden de abril a octubre. La temperatura de Málaga en los meses de verano oscila entre los 23°C y 25°C, y las lluvias son prácticamente inexistentes.
Gracias al viento mediterráneo que sopla desde la costa, el tiempo de Málaga en verano es mucho más llevadero que en otras ciudades andaluzas de interior, como Córdoba o Sevilla. Por todas estas razones, Málaga y los pueblos de la Costa del Sol reciben un fuerte volumen de turistas en primavera y verano.
Málaga en invierno
Los inviernos en Málaga son muy suaves, las heladas son inexistentes y los cielos suelen estar despejados hasta en los meses más fríos. Los termómetros rara vez marcan menos de 15°C en diciembre, enero y febrero, por lo que el clima de Málaga sigue siendo bastante cálido en invierno.
La ciudad alberga una media de 40 días de lluvia anuales, que se concentran en los meses de invierno.
Mejor época para viajar a Málaga
Cualquier época del año es buena para visitar Málaga. Si no tenéis problemas de agenda, lo mejor es planificar un viaje a Málaga en función de vuestras preferencias. Si lo que buscáis es sol, playa y ambiente nocturno, lo mejor es viajar a la capital de la Costa de Sol en los meses de verano. Si, por el contrario, preferís descubrir los museos y monumentos de Málaga, encontraréis más tranquilidad en otoño, invierno y primavera.
Debéis tener en cuenta que puede resultar complicado encontrar alojamiento en periodos como la Feria de Málaga o la Semana Santa. Si tenéis pensado visitar la ciudad en estas fechas clave, lo mejor es reservar el hotel con mucha antelación.